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La “Atenas Veracruzana” siempre ha contado con representativos de calidad; América vino en el 76
- Escrito el:: 12 agosto, 2022
El DUX fue uno de los equipos consentidos que ha tenido la ciudad de Xalapa
Por Julián Rodríguez
El estadio Quirasco estaba a reventar. Era lógico, en el campo estaban a punto de jugar el Deportivo Universitario Xalapeño y las reservas del América, los otrora Millonetas, Cremas y Canarios, apodos que se ganaron por el amarillo de su uniforme y por ser propiedad de Televisa.
En ese 1976 las gradas del mítico escenario estaban totalmente ocupadas, incluso en el Gimnasio Omega, atrás de la portería y los árboles de la calle Cayetano Rodríguez estaban también ocupados por ávidos aficionados, en su mayoría seguidores del cuadro capitalino.
En América, que en ese año cumplía su aniversario 60 venían varios jóvenes que más tarde fueron la base del conjunto como los mundialistas en Argentina 78, Pedro Soto, Eduardo Rergis, Agustín y Armando Manzo, así como Mario Alberto Trejo, Vinicio Bravo, y Alberto Ordaz, entre otros.
El DUX fue uno de los equipos consentidos que ha tenido nuestra ciudad, Su entrega, garra y coraje que le imprimían cada uno de sus jugadores eran únicos. Cuando uno es chamaco ver a esos héroes sin capa fue un privilegio y un honor porque el espectáculo que brindaban dentro del terreno de juego no se comparaba con nada.
Allí estaba un “Diablo” Vázquez, un Ragazzo, un Humberto “Ballena” Morales, un “Batman” Enrique Ramírez, un Carlos Abarca, un “Salsas” Nava y un “Memo” González quien, en lo personal, era lo mejor que tenía el DUX, incluso el delantero veracruzano fue pretendido por el América, pero por causas desconocidas no llegó, aunque se dice que fue el mismo “Panchito” Hernández, el mejor directivo que ha tenido el club americanista, quien llegó al mismo vestidor de la escuadra xalapeña para invitarlo a integrarse al conjunto de Coapa.
Más tarde Xalapa vio desfilar a varios clubes como el Universidad Veracruzana, UV Xalapa, en el que militaron grandes jugadores como Ruvalcaba, Adrián Pajarito, la “Güicha” Hernández, Guadalupe García el “Muñante”, Enrique “Coyote” Guevara y Mario “Chartchai” Morales, todos dirigidos por la leyenda viviente Alfredo “Pistache” Torres.
Posteriormente otros equipos pasaron por el Quirasco como Gavilanes de la UV, en la Segunda División “B”, “La Naranja” Xalapa FC, los Piques Xalapa AC y Delfines de Xalapa, éste por cierto ha sido uno de los últimos que han dejado huella en nuestra ciudad, ya que integrado en su mayoría por puro elemento de los barrios locales despertó el interés de los aficionados, quienes a cada partido como local se “retrataban” por miles en la taquilla para verlos jugar.
Y párele de contar. El máximo escenario futbolístico de la ciudad se apagó. Es cierto que llegaron otros equipos como América Xalapa, Atlético Xalapa, Linces del IVES, Inter de Xalapa, Industriales, Ficumdep, Coyotes y Búhos, pero nunca tuvieron el arrastre del DUX ni de Delfines.
Hoy en nuestro ahora y en este momento surge un nuevo equipo: el Xalapa FC, escuadra que recientemente realizó visorias a la que llegaron muchos talentosos jugadores locales, quienes pueden revivir esa pasión perdida y guardada por muchos años en los aficionados xalapeños.
Sus directivos están haciendo esfuerzos titánicos porque regrese el futbol de antaño, ese que en su momento nos hacía soñar, que nos daba alegrías, pero sobre todo que nos hacía sonreír.
La capital, llamada la “Atenas Veracruzana”, tristemente se ha perdido en la inmensidad del abandono en cuanto al futbol profesional se refiere. Las gradas del Quirasco se han mantenido silenciosas y frías por muchos años ante el desinterés de los auténticos amantes del futbol, esos que ya están cansados de que sólo equipos de ínfima categoría nos representen y lo peor que ni a liguilla llegan, de hecho, algunos han terminado en los últimos lugares de entre más de 200 equipos, y Xalapa, con todo respeto, no se merece eso porque nuestra capital ya no es de tercera. Ya no.
