Al Calor Político




VISÍTANOS DESDE TU MÓVIL
Al Calor Deportivo

Cuidar el césped del estadio Ciudad de los Deportes será clave, asegura especialista

El enorme trajín que le espera a la cancha del Azulgrana obliga a que el mantenimiento sea de “10”

Este fin de semana, el estadio Ciudad de los Deportes albergará dos encuentros. Mañana recibe al Cruz Azul y el domingo al Atlante… Así comienza la nueva era del también conocido como estadio Azul.

Después de seis años, La Máquina regresa a la que fue su casa antes de mudarse al Estadio Azteca en 2018; sin embargo, su retorno a la colonia Nochebuena está plagada de incógnitas y una de ellas es: ¿Se verá afectada la cancha?

 

Raúl Barrios, asesor técnico certificado por FIFA como especialista en mantenimiento y construcción de canchas, compartió a EL UNIVERSAL Deportes su perspectiva sobre el desgaste que se viene para el césped del Azulgrana.

“Es importante saber quién se hará cargo del mantenimiento. Si bien, Cruz Azul y América tienen cuerpos de mantenimiento muy profesionales con los equipos adecuados, no sé si se pondrán a disposición del estadio Azul, que debería ser así”, declaró.

El césped que tendrá el inmueble es el mismo tipo de campo que se usa en el Coloso de Santa Úrsula y para el especialista, el personal y la maquinaria son indispensables o de lo contrario, la cancha podría “tronar” a mitad de temporada.

 

“Lo importante es que tengas el personal, la maquinaria adecuada, los tiempos y los presupuestos. Si tienes esas cuatro, no importa el número de equipos, el campo estará en buenas condiciones. Si no se tiene eso, le doy solamente dos o tres meses en buen estado”, explicó.

En su experiencia, Necaxa, Atlante y América pedían diferentes medidas de campo para sus partidos en el Azteca. Situación que podría afectar directamente al campo, por lo que Raúl Barrios considera ideal unificar criterios.

“Espero que esa coordinación sea desde ahorita y entre los tres equipos se apoyen. La cancha podría tener áreas en mal estado, con un bote peligroso, movimientos raros, zonas con complicado control de balón… La cancha se puede poner muy dura por lo mismo y eso provoca lesiones. Todo eso va en perjuicio del espectáculo y la integridad del jugador”, concluyó.