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Del plato a la boca: Títulos perdidos en el último momento

En este 2016, los azares del destino o los errores en la cancha ya han cobrado dos de esas víctimas

CIUDAD DE MÉXICO, septiembre 1 (EL UNIVERSAL).- A todo el mundo le queda bien claro que así como el deporte te pone la gloria al alcance de tus manos, en unos segundos te la puede quitar y dársela al equipo que muchas veces está en la lona o desahuciado.

En este 2016, los azares del destino o los errores en la cancha ya han cobrado dos de esas víctimas. El primero de ellos es Golden State. El conjunto que dirige Steve Kerr logró romper el récord histórico de más victorias en una temporada de 72-10 que logró Chicago en 1996, que comandó Michael Jordan.

La marca de 73-9 de los Warriors parecía un presagio de que serían los campeones igual que los Bulls de hace 20 años, sin embargo, la historia fue distinta, ya que a pesar de que estuvieron arriba 2-0 y 3-1 en la serie, sucumbieron con los Cavaliers de Cleveland, quienes obtuvieron su primer título.

POR UNA RAYITA. El segundo caso se dio en el futbol mexicano. Resulta que el Monterrey fue el líder en el Clausura 2016 las últimas seis fechas del torneo regular. Terminó con 38 unidades, siete más que el segundo lugar, Tuzos del Pachuca.

En la Liguilla dio cuenta de los Tigres, que era el campeón defensor, luego en un polémico partido dejó fuera al América y, en la final, cuando era favorito para llevarse la copa, apareció el propio cuadro hidalguense y con un gol en tiempo de compensación de Víctor Guzmán le arrebataron el trofeo.

En el Clausura 2013, Cruz Azul vivió un episodio parecido. En el juego de ida de la final le ganaron 1-0 al América en el estadio Azul. Situación que lo alentaba a terminar con casi 16 años sin título en la Liga MX.

Para el juego de vuelta la esperanza celeste se fue hasta el cielo cuando Teófilo Gutiérrez puso el 2-0 en el global. Pero a dos minutos del final, Aquivaldo Mosquera puso el 2-1 con un remate de cabeza. La catástrofe azul comenzó con un remate del portero Moisés Muñoz y una desviada de Alejandro Castro mandó el balón a la red y envió el juego a tiempo extra.

En la siguiente media hora no pasó nada relevante y en los penales, América le sacó el juego a la Máquina, 4-2 en penales.

TRAGEDIA MUNDIAL. Una de las volteretas inmortales se dio en 1950 durante el Mundial de Brasil. El equipo local llegó a la final con la ventaja de que si sacaba el empate, daría la vuelta olímpica ante su público.

La fiesta brasileña parecía empezar, cuando Albino Friaca Cardoso le dio la ventaja a los locales, pero Juan Alberto Schiaffino logró la igualada en el marcador, que aún le daba el título a los de casa. La tragedia llegó a nueve minutos del final, cuando Alcides Edgardo Ghiggia metió el tanto de triunfo para la garra Charrúa que así se convertía en bicampeón mundial.

Otro cruel pasaje se dio en el Mundial de Suiza 54. La Selección de Hungría que comandaban Sandor Kocsis y Ferenc Puskas, era la favorita para llevarse el trofeo a casa.
En la primera ronda goleó 9-0 a Corea y 8-3 a los alemanes. En cuartos de final goleó a Brasil 4-2, en semifinales derrotó por el mismo marcador a Uruguay y en la final se volvió a ver las caras con los germanos.
Todo parecía que luego de la humillación que sufrió el cuadro teutón con los húngaros sería mero trámite, sin embargo, el milagro de Berna se dio, pues los alemanes que perdían 2-0 en ese encuentro le dieron la vuelta y dejaron a los favoritos sin trofeo y ganaron su primer campeonato del mundo.
A BATAZOS. En el Rey de los Deportes también se han dado volteretas o errores que les costaron el campeonato al equipo favorito. Una de las más famosas le ocurrió al primera base de los Medias Rojas, Bill Buckner, quien en la novena entrada juzgó mal una rola de Mookie Wilson, se le pasó por en medio de las manos y a la postre los metropolitanos ganaron el juego seis y la Serie Mundial de 1986.

Para el 2001, el que falló fue el considerado mejor cerrador de los Yankees de Nueva York. Resulta que durante el séptimo juego de la Serie Mundial, Mariano Rivera permitió tres imparables, golpéo un corredor, recibió un sencillo de Luis González y los Diamondbacks de Arizona ganaron su primer y único campeonato que tienen hasta la fecha, cuando los favoritos eran los Mulos.

Diez años más tarde, llegó una tragedia parecida. Neftalí Féliz tenía ventaja de una carrera en la novena entrada del sexto juego, pero David Freese conectó un cuadrangular, empataron la serie a tres juegos por bando y en el último partido de ese Clásico de Otoño lo ganaron los Pájaros Rojos.
Atlanta tuvo dos momentos en la historia en la que no pudieron ganar el campeonato de las Grandes Ligas. El primero fue en 1991, cuando enfrentaron a los Mellizos. Lonnie Smith fue engañado por Chuck Knoblauch, quien fintó que se había quedado con la pelota, entonces Smith se frenó en tercera base y cuando quiso reaccionar no pudo llegar a home. A la postre, Minnesota ganó el campeonato.

El segundo fue cinco años después. En el juego cuatro los Bravos tenían ventaja de 6-3 y si ganaba ese partido se hubieran puesto 3-1 en la serie, pero Mark Wholers cerrador de Atlanta, falló en su relevo y en diez entradas ganaron los Yankees, pusieron la serie 2-2 y luego ganaron 4-2 el galladette.

CON EL OVOIDE. El Super Bowl XXIII fue trágico para los Bengalíes. Cincinatti ganaba 16-13 con 34 segundos en el reloj, pero Joe Montana tenía la última palabra. El mariscal de campo de los 49ers conectó un pase con John Taylor y le dio la vuelta y ganaron el partido 20-16 para que se diera la gran voltereta en el pizarrón electrónico.
Otro capítulo se vivió en el Súper Tazón XLIX. Los Halcones Marinos estaban a una yarda de ganar el juego y convertirse en bicampeones, pero Malcolm Butler interceptó el pase de Rusell Wilson en la zona de anotación y los Patriotas de Nueva Inglaterra ganaran el juego.
El Dato
Super Bowl XXIII
Cincinatti ganaba 16-13 con 34 segundos en el reloj, pero Joe Montana hizo siete puntos a segundos del final.
Una proeza
En el Prode 1985, el Tampico Madero ganó el juego de ida de la final 4-1. En el de vuelta las América metió un 3-0 en tiempo regular y ganó 5-4 en tiempo extra.